Biblioteca de Montserrat
Desde la fundación del monasterio, en el siglo XI, hay constancia de la existencia de obras manuscritas y, desde el siglo XIII, Montserrat tuvo su propio scriptorium, muy activo en los siglos XIV y XV.
La inauguración de un taller tipográfico en Montserrat, promovido por el abad Cisneros en 1499, favoreció la difusión cultural del monasterio.
Durante los siglos XVII y XVIII, la biblioteca creció y diversificó sus fondos hasta llegar a reunir, según consta, miles de obras en sus estanterías. El momento más trágico de su historia ocurrió durante las Guerras Napoleónicas, en 1811, cuando el monasterio fue destruido y se perdió la mayor parte de su tesoro bibliográfico.
La biblioteca actual tiene su inicio a finales del siglo XIX y creció especialmente durante la época en que fue abad el P. Antoni Maria Marcet (1913-1946). En pocos años, el fondo de la biblioteca pasó de quince mil volúmenes a la cifra aproximada de ciento cincuenta mil.
La Guerra Civil española primero y la Segunda Guerra Mundial después interrumpieron las adquisiociones, o al menos las dificultaron. Posteriormente, en los últimos decenios, se han podido duplicar sus fondos.
Destacan las secciones de filosofía, teología, ciencias bíblicas, patrología, liturgia, música e historia del arte. Asimismo, cabe destacar sus apartados de historia general universal, en particular medieval y de Europa, de historia de Cataluña y países de la Corona de Aragón, con un fondo de historias locales y la Guerra Civil de España.
Monografías: 330.000
Publicaciones periódicas: 6.000
Manuscritos: 1.500
Incunables: 400
Siglo XVI: 3.700
Grabados: 18.000
Mapas antiguos: 500