Jordi Alcaraz al Museo de Montserrat
La exposición, que lleva por título Nits, está comissariada por el historiador y crítico de arte Bernat Puigdollers, y se sumerge en el mundo insólito de su obra, resultado de una mirada lúcida y maravillada del mundo. Esta exposición hace temblar el concepto de pintura comunmente aceptado e invita a una reflexión en torno al propio hecho creador, el yo y la realidad. Alcaraz centra la mirada en las cosas subtiles e imperceptibles, penetra en el abismo de lo intangible. Des de la materia, evoca la idea todavía no formulada, el aura del objeto, reflexiona entorno a la propia existencia, entorno los límites de su mundo, unos límites que no tienen frontera, que se escurren en subtilezas esquivas. Sirviéndose de materiales bien diversos –metacrilato, tinta, hierro– rompe, desde el propio género, los límites de la pintura, la escultura y el gravado.
El espacio de la Sala Daura ha estado completamente transformado para adaptarse a las necesidades de la obra de Jordi Alcaraz (Calella, 1963), que luce en un lugar idóneo para conocer su producción. El artista ha preparado dos instalaciones inéditas para la ocasión, una mezcla de ironía, concepto, reflexión y expressión plástica en perfecto equilibrio. A pesar de que su obra pueda parecer en ocasiones efectista, el juego o el ingenio no llega a ser nunca banal; es, solamente, un elemento catalitzador, una chispa que lleva al espectador hacia un territorio de reflexión personal.
La obra de Jordi Alcaraz es sutil, pero a la vez contundente y enérgica, una obra que es fiel a la tradición artística, pero que a la vez rompe con el pasado. Así lo testimonian los numerosos objectos de anticuario - libros antiguos, marcos del siglo XVII o una imagen religiosa de finales del XVIII-, que sirven de pretexto para darles un sentit contemporaneo pero, a la vez, de todos los tiempos. En la obra de Alcaraz, la materia adquiere un protagonismo esencial como via para la expresión plástica; asímismo, es una obra precticamente imposible de definir porque realmente su materia es el misterio.
La práctica artística de Jordi Alcaraz trasciende las categorias tradicionales de pintura, escultura y dibujo para acercarse al ensamblaje y a la instalación, reflexionando sobre la noción de volumen, el lenguaje como idea y el paso del tiempo. Según J. F. Yvars, “las obras de arte son organismos hechos de materia viva, sometida a la alquimia de los elementos y las técnicas expresivas, la cual impone su verosimilitud
con el tiempo. Respiran, gimen, suenan, se agrietan y se reajustan en el acorde adecuado que dibujará la sinfonía inacabada de su actividad plástica.” La combinación de materiales tan diversos como los espejos, los libros o el metacrilato hacen que los elementos interactuen aprendiendo como respirar, gemir o sonar conjuntamente.
La exposición Nits, que se puede ver en la Sala Daura del MDM hasta el 17 de noviembre, es una oportunidad única para conocer la obra de Jordi Alcaraz y sumergirse en su mundo plástico. El artista, pese a ser reconocido a nivell internacional con un gran éxito de venta y de crítica, todavía no ha recibido el reconocimiento público que merece en nuestro país. Por esta razón, la muestra Nits también quiere contribuir a darlo a conocer en el contexto del arte catalán contemporáneo.
Jordi Alcaraz (Calella, 1963), vive y trabaja en Calella, Barcelona. Des de mediados de la década de los ochenta ha presentado su obra en exposiciones individuales y colectivas en Europa y, más recientemente, en los Estados Unidos. Ha publicado diversos libros de artista en ediciones limitadas. En 2017 realizó una exposición individual en la Fundació Vila Casas, de Barcelona titulada Esborradís. Ha expuesto en museos y centros como el Museu d’Art Contemporani d’Alacant (2017); Château des Princes de Croÿ, Roeulx, Bèlgica (2015); Boghossian Foundation, Villa Empain, Brussel·les (2014); Musée Réattu, Arles, França (2013); Los Angeles Municipal Art Gallery (LAMAG), Los Angeles, USA (2011); LACMA, Los Angeles, USA (2011); Museum Der Bildenden Künste, Leipzig, Alemanya (2010); Arts Santa Mònica, Barcelona (2010); Centre d’Art Tecla Sala, L’Hospitalet de Llobregat, Barcelona (2008) o Fundación Telefónica, Madrid (2001), entre d’altres. Les seves obres es troben a col·leccions com Biedermann Museum, Donaueschingen, Alemanya; Colección Fontanal Cisneros, Miami o Williams Collection, Nova York, entre otros.